El dilema de amig@, ¿dejar atrás la Friendzone?


Yo sé que a todos nos ha pasado alguna vez, ser Friendzoneado. Yo utilizo la  denominación "Amigo Sprite" al amig@ frienzonead@ porque había un comercial del refresco Sprite donde hablaban del amig@ rondando al amig@ "teniéndole ganas" esperando la oportunidad de cambiar esa "amistad" por un "algo más". Al final,  invitaba simplemente a de decir y llamar las "cosas como son", sin disfrazar. A mi este comercial me causó mucha gracia en su momento, reconocer estas conductas en la vida real es muy divertido, vivirlas, a veces no tanto. Hablar de "Friendzonear" da para toda una charla, tal vez en otro momento. 

Esta entrada más bien fue motivada por el otro caso, pienso menos frecuente pero que también es posible, cuando de una chispa de amistad se va encendiendo la relación poco a poco. Como dentro de esa convivencia cotidiana y mundana se van desenmascarando y enfatizando facetas de uno y otro hasta convertirles en detonantes de algo que no se había contemplado antes. Cuando va naciendo ese deseo concreto por entre ese deseo intelectual, solidario o existencial. Much@s quedan en la antesala, a veces el deseo, esa atracción primaria visual y química resulta muy importante, pero cuando las cosas cambian de color o alguien se atreve a dar ese primer paso ¿Qué pasa? alguien seguramente dirá: "no quiero que andemos, porque es mi amig@"... pero esa regla nunca existió, yo planteo ante esa situación: ¿porqué no?

Conozco de casos de amig@s que así les sucedió, que de una atracción secundaria, es decir, no visual, no química, no sexual; se desarrolló una atracción que desembocó en una relación más profunda, y en muchos de los casos, duradera. Tampoco es que sea algo infalible, igual también tendrán sus problemas a superar, seguro. Las relaciones son como son, no deberíamos encasillarlas, lo que si, y creo que eso en estos tiempos es más accesible, es buena la apertura que hay para expresar con franqueza lo que se quiere.

Con intenciones más claras nos liberamos de estereotipos. La invitación es a desaparecer las dudas de una vez preguntando y contestando: "¿Te gustaría intentar?", "¿Va o no va?" , un sugerente "¿Vamos?" o hasta directamente la incomodísima (que no lo debería ser) "Y nosotros, ¿Qué onda? ¿Qué somos? ¿A qué vamos?", etc. Y así, definir de una vez si va, nos vamos, o nos quedamos, opciones hay.

Al final somos lo que somos, no lo que aparentamos. Si queremos ser, hay que hacer. La posibilidad existe, así como la posibilidad de sacarse de dudas y aclarar, antes de que sea demasiado tarde, o demasiado ventajoso para algún lado. Lo feo de la situación del Friendzone es cuando se da ese desequilibrio ventajoso donde uno da todo por una oportunidad y del otro lado recibe sin querer nada en realidad. ¡Una encrucijada mal!

¿Por qué no conocerse y contarse la vida antes de un beso? ¿Por qué el mejor amig@ no puede ser el mejor amante? ¿Por qué no podemos cambiar lo ya estipulado? ¿Si quieres y puedes? , si puedes y quieres ¡Hazlo! o no lo hagas... pero decide pronto: franqueza. Lo dejo ahí... ¡Buena suerte!

P.D. Esta entrada la escribí hace mucho mucho tiempo, años creo, es una divagación que se cuestionó el vagabundo de aquel entonces, curiosamente, mantenía cierta vigencia vintage hasta hoy, y después de un retoque de actualización, decidí compartirla. Gracias por leer, comentar, acompañar. 

Acá el comercial que inspiró parte de la entrada de hoy, ¡un clásico!

Comercial Sprite #lascosascomoson #tetraeganas

Comentarios

Entradas populares de este blog

El Crucero Pirata

Divagaciones atemporales: Dinero VS Tiempo