Marchas funebres y nupciales


Hay épocas para cada cosa. Hubo una época en la que recuerdo como la mayoría de los amigos se iban yendo, tomando tal vez no la más grande pero si una de las decisiones mas importantes de su vida, casarse. ¿Porqué la mayoría tiende a caer? ¿será nuestra necesidad biológica que al final de cuentas nos apabulla el instinto y nos es necesidad?

Y no solo los amigos, también las amigas, en general (y no es que me jacte de ello pero en general así me ha parecido) éstas últimas con mayor entrega y gusto por hacerlo. También pienso que el momento les llega y sobre todo ya a cierta edad, la presión familiar y la idea del paso de los años y el cuidado de hijos me parece logran hacer la diferencia.

Incluso yo estuve alguna vez a punto de caer, quise lo suficiente como para haberlo hecho, un par de veces al menos así lo creí.

Recuerdo la boda de mi entonces novia en aquellos años febriles. Chica tranquila con quien compartimos muchas cosas por primera vez, desde el beso inocente y deslenguado, hasta los primeros jugueteos de piel con piel que buscan llegar a algo más. Entonces todo parecía tan impresionante y natural a la vez. Las cosas sólo sucedían y no teníamos mayores expectativas más allá de esperar que así fuera toda la vida. La intensidad de los sentimientos en esa etapa de la vida es tan grande, que incluso después parece casi ficticia, idílica,  prácticamente imposible quizás de volverse a repetir.

Cuando uno crece se pregunta ¿cómo mantener esa llama encendida? 

Conozco de amig@s que prefieren no molestarse en mantener una llama encendida. El camino fácil parece bastante práctico. Encender la llama, disfrutar de esa efímera efervescencia inicial llamada enamoramiento. Esa etapa en que crees poder hacer todo por estar con esa persona: dejar de lado actividades, mantener la vigía toda la noche, acudir cansado a donde quiera que te necesiten, estar ahí en toda la extensión de la palabra, ver todo lo bueno, minimizar lo malo, etc. etc. etc. Pinta bien, ¿no es verdad? pero ¿cuanto tiempo  dura? ¿una noche, dos semanas, un mes, tres meses? ... es triste el vacío que queda al final de cada intento. Pero es práctico estar disponible para comenzar en cualquier momento una nueva aventura pasajera. Todo tiene pros y contras, quienes viven así lo saben, y encuentras más pros que contras obviamente.

Me parece una muerte mucho más alargada, más intensa, pero a la vez, menos trascendente. Cada quien decide que marcha tocar con su vida, si fúnebre o nupcial o ambas en una....


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